Bañada por el mar Mediterráneo, la Costa del Sol abarca más de 150 kilómetros de litoral en la provincia de Málaga, al sur de la Península Ibérica.
No es de extrañar que esta región sea uno de los destinos turísticos preferidos por los europeos. Describir la Costa del Sol es transportarse a un eterno verano: más de 300 días al año de sol haciendo honor a su nombre, playas con agua templada típicas del mediterráneo, extensa oferta de deportes y ocio, paisajes sumamente contrastantes entre mar y montaña, un ambiente relajado y una gastronomía exquisita.
Torremolinos, Mijas, Marbella, Estepona, Benalmádena. Solo algunos de los pueblos o ciudades que podemos encontrar en esta región. Ninguno decepciona y cada uno de ellos comparte el encanto andaluz sin dejar de desplegar su individualidad. Málaga, su capital, es la sexta ciudad en número de habitantes de toda España.
La tendencia del mercado inmobiliario sigue registrando un alto dinamismo en la región. Ya no hablamos únicamente de personas que buscan una segunda residencia o que desean retirarse en un futuro, sino que la tendencia viene cambiando de la mano de la tecnología y modalidad de trabajo. Un gran número de jóvenes que eligen la Costa del Sol para teletrabajar y pasar más tiempo del año allí.
La provincia de Málaga acapara una cuarta parte del mercado inmobiliario de la vivienda y un 18% de obra nueva. Los motivos se remontan a sus características y a la presencia del turismo de golf siendo Marbella la provincia con mayor número de campos en toda España. La realidad es que el entorno es ideal para los compradores de vivienda.